sábado, 29 de julio de 2023

Acompañar: Un Baile de Almas en el Presente

En el lienzo del alma, el acompañamiento espiritual se erige como un arte sublime. Como pinceles delicados, el silencio y las palabras se entretejen, pintando el paisaje de emociones y sueños compartidos. El acompañante, si es artista despierto y amoroso, despliega su lienzo en blanco para acoger las vivencias del otro.

    En la paleta de la escucha activa se mezclan los tonos de la comprensión y la empatía, creando matices de alivio y sanación. Con cada trazo, se dibuja la ruta hacia la verdad interior, en consonancia con la voluntad de lo Alto. La danza del tiempo se desvanece, y el presente se tiñe de eternidad.

    En la galería del corazón, el acompañado comparte sus vivencias con valentía, mientras el acompañante sostiene las lágrimas y celebra las risas

    El arte del acompañamiento es un acto de entrega, donde el don de uno se convierte en el lienzo donde el otro encuentra su propio color. Es un abrazo en silencio y una mirada que comprende sin juzgar. Es un canto de esperanza y un faro que ilumina, aún los pasos dados en penumbras.

    El alma del acompañante y del acompañado se entrelazan, tejidas por los hilos invisibles de la verdad y la confianza. Juntos caminan por el lienzo de la vida, esculpiendo sueños y transformando heridas en cicatrices de amor. En tanto guía el Espíritu, ambos encuentran su refugio, su hogar en el abrazo del Otro.

Juan Manuel Otero Barrigón

No hay comentarios:

Publicar un comentario